Es realmente sorprendente cómo algunas personas pueden tener corazones tan crueles. Si miramos con suficiente atención, a menudo podemos ver esto en nuestra vida cotidiana, pero algunas historias sobre animales descuidados, abandonados o maltratados son los mejores ejemplos.

La historia de hoy nos muestra a dos perros abandonados que se encontraban al límite debido a los actos crueles de aquellos en quienes más confiaban.

Afortunadamente, el propósito de esta historia no es condenar a esas personas, sino celebrar a esas almas buenas que aparecieron de la nada y les trajeron felicidad.

Cuando estas personas de buen corazón pasaban junto al ferrocarril, vieron algo pequeño y acurrucado debajo de la vía. Tan pronto como se acercaron, sus corazones se rompieron al darse cuenta de que un pobre cachorrito estaba atrapado allí.

Inmediatamente acudieron corriendo a ese lugar y ayudaron al pobre pequeño a sacar la cabeza de allí. Cuando uno de los rescatistas lo tomó en brazos, todavía estaba tan asustado que no podía dejar de temblar.

Esto no fue una sorpresa considerando el hecho de que fue abandonado y traicionado por humanos. Esta buena gente, sin embargo, no podía creer que alguien tuviera el corazón para hacer tal cosa.

Estaban indignados y decepcionados, pero al mismo tiempo esto los motivó aún más a ayudar al pobre perro y asegurarle un futuro mejor. Cuando el cachorro finalmente logró calmarse y empezar a confiar un poco en ellos, lo llevaron a la clínica veterinaria.

El veterinario encontró muchas pulgas y parásitos en su cuerpo y su temperatura era muy inestable. Todo esto era prueba de que llevaba mucho tiempo abandonado.

A pesar de todas las dificultades, el cachorro pudo superarlas todas con la ayuda de buenas personas. Todavía no podía ir a ningún lado porque instantáneamente contraería una infección que empeoraría su enteritis, pero estas personas estaban convencidas de su brillante futuro.

Creían que una vez que estuviera completamente vacunado, se recuperaría por completo y encontraría su hogar para siempre. Este perro definitivamente se lo merecía.

Estas grandes personas no se detuvieron únicamente con esta buena acción. Mostraron su gran corazón en otro desgarrador caso de abandono de perro.

Cuando la encontraron, la pobre canina, luego llamada Diana, estaba tirada en la calle, como si fuera basura. Para empeorar las cosas, su dueño anterior envenenó a todos sus hermanos, y ella no tuvo tal destino solo por pura suerte.

Aunque quedaron devastados por esta desgarradora visión, estas personas no esperaron ni un minuto e inmediatamente la llevaron a sus instalaciones. La pobre Diana estaba en tan mal estado que no podía dejar de vomitar. Aparte de eso, tenía dificultades para caminar debido a su enorme barriga.

Sin embargo, al igual que el perro anterior, esta valiente niña supo superar todas las dificultades y, tras unas semanas de tratamiento, mejoró mucho. Estaba en buena forma, siempre sonriendo y siempre corriendo. Considerándolo todo, Diana era una perra nueva.

Lo único que le faltaba era un final feliz, pero no dudamos que lo encontrará muy pronto.

Aunque estas dos historias tuvieron un comienzo terrible, grandes personas se esforzaron por hacernos brotar lágrimas de alegría en ambos casos. Lo lograron porque demostraron que todavía hay almas buenas que hacen que valga la pena vivir esta vida.